LA VERDAD que tanto nos acarrea …

La verdad es débil pero fuerte en sus descendiente,
cuando se agarra por loscuatros costados en su verdad
de horizontes, ella no cambia,no modifica su idea ni su modelo
de estética, aunque pierda batallas sigue en su claridad
de verdad,ella es paz, es luz clarificando tierras.
Tierras atrapadas a veces de los inframundos, esperando
ser recatadas de ocultas mentiras, mentiras que aún
después de generaciones se pasean sin que las vean,
disfrazadas de galanterías, como de heridas convalecientes,
caminando de verdad por bandera, anulando a veces
a quien en verdad herida sangra y necesita la claridad
de ella para ser favorecida en la humanidad, creyéndola
y no poner de montera a la mentira por conveniencia,
de interés de sí mismo o por grandes del hacer,
por no mover los hilos ya puestos…

La verdad siendo un orgullo cuando se la defiende,
cuando se la señala siendo paz de sueños, de luz naciente,
que como rayo en estrella recoge el cielo deslumbrando
hasta el amanecer del sol a la tierra.Y que es hora
que nos acojamos a esa verdad que nos recuerda
como nos arraiga en rasgos y rostros siendo es única
en su conciencia como en su descendencia
para los que un día vengan y en orgullo
de herencia vivan, en este tiempo y en otros
 de generaciones de genes.

La verdad es felicidad en nuestras manos,
en el decir en la historia que es y fue insignia
de nuestro tiempo, sin batalla de lo vivido
y sin malogrados de injusticias. Es hora de verdad
sin ser presa de la mentira,  para compartirla
en vida como en naturaleza viva, de nuestro ser
como nuestro descender de las actitudes,
creciente de verdades  como de corazones…

Autora:Lucía Pastor

MIS OJOS HUNDIDOS EN LÁGRIMAS

Mis ojos hundidos en lágrimas
miran casados las ironías como la impotencia,
de no ver más justicia del cielo en la tierra,
quizás si haya pero mis ojos
cansados están de tanto esperar,
en la esperanza que es como nos da la vida…

Mis ojos hundidos en lágrimas
saben que un día no muy lejano cerraran
al mundo,un mundo qué aunque allá sea azul
en su ver como en su respirar,
quieren ver antes de cerrar
de aquellos que ama la felicidad,
la estabilidad como la cordialidad.
Quieren ver la verdad sin falsedad,
del pisar de mi tierra como de mi cielo,
en la oportunidad que nos dan,
en el saborear de lo dulce
después de mucho amarguear,
en lo que en su paciencia del tiempo cautivó,
de amor como de dolor en el orden de amar,
aún en lágrimas del alma como del paladar...

Mis ojos aún hundidos en lágrimas
alcanzaran al fin el camino preparado por el destino,
sin más tropiezos preparados por el mundo,
mundo que a veces nos hunde en la tierra,
dejándote cubierta, para no ver del cielo
que la luz es transparencia…




Autora: Lucía Pastor
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AHORA SÉ QUE LA NOCHE APRENDIÓ

Ahora sé que la noche aprendió
porque aprendimos de sus traslados
enlazados como de sus pasos,
de caminos atrancados
que vagan entre lunas
ciegas a la izquierda,
como de soles amarran
la oportunidad de amarnos,
siendo verdad de amor
siendo verdad sin límites de horarios…

Ahora sé que la noche aprendió
porque aprendimos a amarnos
aún en su oscura lacea,
sábanas blancas esclarecían,
cubriéndonos de seda aun tergal fuera,
en los instantes que de amor
a veces en peligro nos convence
de que en la noche el amor no existe,
rompiéndonos las barreras del sonido
de la noche como del día,
y aún conociendo su agonía
acariciamos su pedestal
de amor del cielo oculto en la tierra…


Ahora sé que la noche aprendió
porque aprendimos de amor,
en su ascender como en su descender.
Ahora sé de la noche en su sentir,
como en su escribir,
como sé del día en la noche
en lo que de luz ve y merece ver,
Porque amándonos amamos
en ese amor sin interés de ser
ni del mundo…

Autora:Lucía Pastor



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CAMPOS DE TIERRAS

Campos de tierras

en tormentas encarnizadas

arrastran furias de pobreza,

cuando de luz el cielo

enciende sus mechas,

para que veamos

que es llama de trabajo

como de descendencia,

y no tierra de hierba seca

en secuelas de matorrales,

apagando horizontes.

Aún en desiertas tierras

nos enseña el arcoíris

de sus colores,

de tierras de racimos

de amor y porvenir,

que aproxima nuestro destino,

aún en tierra cargada

de armas sin almas

preparada sin calma,

solo por arrancadas

en nosotros mismos

de vacíos cautivos…


Autora: Lucía Pastor

 
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